La tecnologíay el canto de las Sirena
- mayo 12, 2024
- Publicado por: Consultora Monica Dreyer
- Categoría: Columna semanal
Es indiscutible los beneficios de la tecnología y la necesidad de estar a la vanguardia a riesgo de perecer. Sin embargo, estar atentos a los peligros no de la tecnología, sino del uso que nosotros le damos.
¿Te ha sucedido la necesidad imperiosa por pasar por cada una de las redes sociales? Instagram, tik tok, fb, X… se convierten en algunas personas, en un ritual obsesivo irrefrenable hasta no haber pasado por cada uno de ellas.¿Cuándo es un comportamiento compulsivo? ¡Cuando no podemos dejar de hacerlo! O comenzar una serie y no poder parar. Los videos juegos hasta altas horas de la madrugada. Revisar el celular constantemente a pesar de no tener mensajes.
De repente nos encontramos mirando historias de Instagram de personas que ni conocemos como atrapados en una realidad virtual. Esto lleva a un exceso de información y una especie de adormecimiento en el cerebro que quita la posibilidad de un stop, de un parar. Es como el “canto de las sirenas” un famoso mito donde las sirenas a través de su canto seducían a los marineros quebrando su voluntad hacia un desenlace negativo. En este caso la tecnología es fascinante y puede funcionar como una seducción con consecuencias para nuestra salud.
El otro día me vi atrapada. Me quedé editando un video de música que no era ni urgente ni importante, pero me encanta hasta altas horas de la noche. Fue como el canto de las sirenas, no podía parar.
Es una rica experiencia para aprender a instaurar un semáforo que indique un STOP, que hay que PARAR.
Estas situaciones son riesgosas si se perpetúan porque trae una disminución de los reflejos, la memoria, las funciones cognitivas superiores, dificultades para pensar, decidir, actuar.
¿Qué aprender? ¡Primero tomar conciencia! Algunas personas no tienen un registro en su cuerpo del cansancio o la saturación de la información y éste les avisa cuando hacen crisis. Dolor de cabeza, gastritis, palpitaciones, agobio, estrés.
¿Cómo instaurar en la mente un semáforo que te de un stop antes de la saturación?